Oh, María, sin pecado concebida,
ruega por nosotros que recurrimos a ti.
¡Bendita tú entre todas las mujeres!
¡Bienaventurada tú que has creído!
tu corazón fue traspasado
junto con el corazón de tu Hijo
y ahora no cesas de interceder por nosotros.
Te consagramos nuestras fuerzas
y disponibilidad para estar
al servicio de la evangelización.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
Jesús nos habla de la acogida y lo hace de una manera desconcertante y revolucionaria.… Read More
Hacer el bien es importante, pero no suficiente: Madre Teresa de Calcuta, con la ayuda… Read More
El Papa León XIV inaugura junio con una oración inédita al Sagrado Corazón: un mensaje… Read More
En un mundo que sigue buscando respuestas, las palabras de un Papa, pronunciadas hace muchos… Read More
Entre las oraciones más conocidas y queridas del cristianismo se encuentra, sin lugar a dudas,… Read More
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Acto de consagración… Read More