En aquel tiempo, empezó Jesús a explicar a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalén y padecer allí mucho por parte de los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, y que tenía que ser ejecutado y resucitar al tercer día.
Pedro se lo llevó aparte y se puso a increparlo: «¡No lo permita Dios, Señor! Eso no puede pasarte.»
Jesús se volvió y dijo a Pedro: «Quítate de mi vista, Satanás, que me haces tropezar; tú piensas corno los hombres, no como Dios.»
Entonces dijo Jesús a sus discípulos: «El que quiera venirse conmigo, que se niegue a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga. Si uno quiere salvar su vida, la perderá; pero el que la pierda por mí la encontrará. ¿De qué le sirve a un hombre ganar el mundo entero, si arruina su vida? ¿O qué podrá dar para recobrarla? Porque el Hijo del hombre vendrá entre sus ángeles, con la gloria de su Padre, y entonces pagará a cada uno según su conducta.»
Palabra del Señor
Hoy, tráeme a las almas tibias y sumergelas en el abismo de mi Misericordia. Estas… Read More
Salmo 117,1.14-15.16-18.19-21 R/. Te doy gracias, Señor, porque me escuchaste Dad gracias al Señor porque es… Read More
Evangelio según San Marcos 16,9-15. Jesùs, resucitado al amanecer del primer día de la semana,… Read More
A las 10 tendrán lugar los funerales del Papa Francisco en la Plaza de San… Read More
El 25 de Abril la Iglesia recuerda San Marcos de León, “el león alado”. El… Read More
Oración Inicial En el Nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Señor… Read More