R/. Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti
Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti.
Yo digo al Señor: «Tú eres mi Dios».
El Señor es el lote de mi heredad y mi copa,
mi suerte está en tu mano. R/.
Bendeciré al Señor que me aconseja,
hasta de noche me instruye internamente.
Tengo siempre presente al Señor,
con él a mi derecha no vacilaré. R/.
Por eso se me alegra el corazón,
Me enseñarás el sendero de la vida,
En el calendario de los grandes eventos del Año Santo, el 11 y 12 de… Read More
Hay un profundo pensamiento de San Carlo Acutis que encierra en pocas palabras un gran… Read More
La Comisión para Tierra Santa de la Orden del Santo Sepulcro de Jerusalén ha iniciado… Read More
El Evangelio del día del 23 de octubre nos presenta palabras fuertes de Jesús: no… Read More
Un encuentro sin precedentes se prepara en el Vaticano: el del rey Carlos III y… Read More
El Evangelio del día del 21 de octubre nos habla de vigilancia y esperanza. Esta… Read More