Colleen Willard está casada y es madre de tres hijos ya adultos. Ella afirma que su curación inició después de su visita a Medjugorje en 2003.
Colleen hizo saber que, en 2001, sufría mucho de dolores en la espalda, y ni siquiera era capaz de levantarse de la cama. Pronto le operaron y la tranquilizaron ya que la cirugía había salido bien: le garantizaban una recuperación en seis semanas. Pasó este tiempo y no había mejorado nada. En efecto siguió sufriendo. Después de una serie de controles médicos, descubrieron que tenía un tumor cerebral.
Toda su familia entró en un estado de shock, pensaban que no era posible todo eso. “No dejaba de repetir que me habían dejado sin nada. ¿Qué he hecho, por qué todo esto ahora, yo crecí en una familia católica … ¡Realmente no sabía cómo manejar esa situación nueva en absoluto! “, afirmó Colleen. “Mi esposo y yo decidimos consultar a algunos otros médicos, pero su opinión era también que el tumor era demasiado grande y que no era posible operar. “
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