Medjugorje: era un vegetal, no había esperanza para él

Precipitado con el paracaídas: a Medjugorje el milagro

Precipita con un paracaídas y permanece en estado vegetativo, hasta el viaje a Medjugorje: así comienza la historia de Alessandro que, el 12 de julio de 2008, cayó desde una altura de 35-50 metros.

La madre cuenta que, durante el viaje para el hospital donde lo habían llevado con urgencia, comenzó, en realidad, su conversión.
Ella siempre había orado muy poco, pero aquel día: “¡No pude hacer más que orar! Padre nuestro, Ave María, Padre nuestro, Ave María … Santa María, si lo salvas, te prometo que voy a Lourdes.. ”

Alessandro se sometió a una cirugía cerebral, pero una hemorragia cerebral causó la remoción de una parte del cerebro.
Los médicos no le dieron ninguna esperanza a la madre de Alessandro, pero ella no pudo dejar de orar.

Ella y su esposo cuidaron al hijo durante días.
Mientras tanto, él estaba vivo, pero cuando fue dimitido, su diagnóstico resultó terrible: “estado vegetativo” sin posibilidad de recuperación, dijeron los médicos.

El viaje a Medjugorje inspirado por la oración.

“Un día de abril de 2009, me desperté una mañana con un pensamiento fijo: ¡tengo que ir a Medjugorje!”. “8 de mayo de 2009, llego a Medjugorje, me pongo delante de la Iglesia y rezo, rezo, rezo … durante tres días me quedo allí, porque no sabía nada sobre Medjugorje, del Cristo resucitado, de la Colina de las Apariciones, del Monte de la Cruz, ¡Ni siquiera sabía que la Virgen aparecía y que había los videntes! Nada!”.

En poco tiempo, la madre de Alessandro empezó a comprender en qué lugar se encontraba y no dejó de ir allí, al menos una vez cada tres meses.
Sus oraciones se han convertido en su razón para vivir y ahora Alessandro camina y está recuperando cada actividad cerebral: entiende todo pero no puede hablar. Él entiende todo, incluso si todavía no puede hablar. Él es consciente de su condición y sigue mejorando, a diferencia de lo que los médicos habían dicho.

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