Bruno tenía cincuenta años y había dejado de participar en los Sacramentos y decidió volver a hablar con Dios, justo cuando atravesaba un período de grave crisis.
Volver a orar restauró de inmediato parte de la serenidad perdida, tanto que decidió contribuir a las actividades de la parroquia, apoyando la formación posterior a la confirmación de los niños en su barrio.
También comenzó partecipar en reuniones de oración, principalmente basadas en la recitación del Santo Rosario.
En una de estas reuniones, encontró a un viejo amigo de la escuela, que lo involucró en un viaje a Medjugorje. Su amigo fue allí por trabajo, por un corto período de tiempo, y Bruno, que no sabía nada de lo que estaba sucediendo allí, rechazó la oferta al principio.
¡Su hermana le hizo cambiar de opinión y simplemente le dijo que había sido elegido por ese viaje! Bruno, entonces, decidió ir a Medjugoje y le dijo que, cuando se encontró allí, sintió que tenía que arrodillarse y orar, frente a la estatua de la Virgen.
Simplemente no podía evitarlo, sin preocuparse por las personas que lo rodeaban. Sus oraciones se hicieron cada vez más intensas y frecuentes; le hicieron descubrir como es fácil dejarse caer en los brazos de la Mamá celestial.
Puede interesarte -> Increíbles fotos tomadas en Medjugorje: te dejarán sin palabras
Cuenta Instagram de la Luz de Maria -> Aquí
La fe es un grito que nace del corazón, un deseo profundo de luz cuando… Read More
La perseverancia es el aliento oculto de los discípulos, la fuerza silenciosa que sostiene en… Read More
La oración perseverante es el hilo que une al hombre con Dios incluso en los… Read More
El día del Hijo del hombre es un llamado que atraviesa los siglos, una invitación… Read More
En Belén, la Gruta de la Natividad vuelve a ser símbolo de luz y renacimiento.… Read More
En el mensaje dirigido a la Conferencia Nacional sobre las Adicciones, el Papa León XIV… Read More