porque el Reino de los Cielos se parece a un propietario que salió muy de madrugada a contratar obreros para trabajar en su viña.
Trató con ellos un denario por día y los envío a su viña.
Volvió a salir a media mañana y, al ver a otros desocupados en la plaza,
les dijo: ‘Vayan ustedes también a mi viña y les pagaré lo que sea justo’.
Palabra del Señor
El Evangelio del día del 21 de septiembre nos anima con una parábola inesperada. Un… Read More
En la Pacem in terris, Juan XXIII denuncia la ilusión de una paz fundada en… Read More
En el Jubileo de los Jóvenes 2025, León XIV recordó una de las frases más… Read More
León XIV se reunió con los obispos de nueva nominación en el Aula del Sínodo.… Read More
La vida encuentra su esplendor más auténtico en un contexto muy preciso. San Carlo Acutis… Read More
Entre las oraciones cristianas, el Padre Nuestro custodia un misterio de intimidad y confianza que… Read More