R/.Un corazón quebrantado y humillado,
tú, Dios mío, no lo desprecias
Misericordia, Dios mío, por tu bondad,
por tu inmensa compasión borra mi culpa;
lava del todo mi delito,
limpia mi pecado. R/.
Pues yo reconozco mi culpa,
tengo siempre presente mi pecado.
Contra ti, contra ti sólo pequé,
cometí la maldad en tu presencia. R/.
Los sacrificios no te satisfacen:
si te ofreciera un holocausto, no lo querrías.
El sacrificio agradable a Dios
es un espíritu quebrantado;
un corazón quebrantado y humillado,
tú, oh, Dios, tú no lo desprecias. R/.
Cuenta Instagram de la Luz de Maria -> Aquí
La historia de la salvación está atravesada por dos movimientos opuestos: la caída y el… Read More
Por primera vez en su historia, Roma acoge la reliquia de la Preciosísima Sangre de… Read More
Las palabras de Madre Teresa de Calcuta nos recuerdan que el corazón del hombre es… Read More
El 25 de noviembre Roma acoge una cita que une fe, tecnología y sostenibilidad. Un… Read More
A veces el camino espiritual parece detenerse ante nuestros límites. Pero justamente allí, en el… Read More
Hay palabras de los santos que parecen susurros, pero en realidad abren horizontes inmensos.La reflexión… Read More