¡Oh! Santísima Virgen Niña,
que desde temprana edad
te consagraste al Altísimo,
y le serviste con fidelidad y amor,
que viniendo al mundo consolaste la tierra
que en Ti saludó la aurora de la Redención,
hoy acudo a ti para decirte lo mucho que te amo
a decirte que eres la luz y el consuelo de mi alma,
y a pedirte, por los prodigios de gracia y favor
que siempre derramas sobre nosotros,
que escuches piadosa mis suplicas.
Niña Santísima,
dirige tu bondadosa mirada
hacia todos los que sufrimos,
hacia los que pasamos por serios problemas
y que día a día luchamos con ahínco
por superar las dificultades y necesidades
que tanto dolor y amargura nos causan.
Toda mi esperanza y confianza deposito en Ti,
¡oh dulce Virgencita!
intercede, te ruego, ante tu amadísimo Hijo
para solucionar las penas que me afligen
y en especial para remediar esta urgente necesidad
que en este momento tanto me oprime:
(hacer con mucha fe la petición)
Muéstrame pues, mi adorada Virgen Niña,
que el tesoro de gracias que dispensas es inagotable,
porque ilimitado es tu poder
sobre el Corazón paternal de Dios.
Escucha y atiende ¡oh Virgen Niña!
mi ardiente súplica
y alabaré eternamente la bondad de tu Corazón.
Amén.
Rezar la Salve y tres Avemarías.
Puede interesarte -> Oración para pedir tres gracias a la Virgen Niña
Cuenta Instagram de la Luz de Maria -> Aquí
León XIV y el Borgo Laudato si’ se encuentran en Castel Gandolfo: el viernes 5… Read More
El amor a Dios no es estático ni distante, sino un movimiento que involucra a… Read More
El Papa León XIV nos recuerda una tarea urgente: curar a las personas heridas sin… Read More
La canonización de Pier Giorgio Frassati, celebrada en la plaza de San Pedro por el… Read More
En el Evangelio del día del 13 de septiembre, Jesús habla con imágenes sencillas pero… Read More
Carlo Acutis nos deja una pregunta que interpela profundamente, una reflexión que va más allá… Read More