Dios, Padre misericordioso, que has revelado tu amor en tu Hijo Jesucristo
y lo has derramado sobre nosotros en el Espíritu Santo, Consolador,
te encomendamos hoy el destino del mundo y de todo hombre.
Inclínate hacia nosotros, pecadores; sana nuestra debilidad; derrota todo mal;
haz que todos los habitantes de la tierra experimenten tu misericordia,
para que en ti, Dios uno y trino, encuentren siempre la fuente de la esperanza.
Padre eterno, por la dolorosa pasión y resurrección de tu Hijo,
ten misericordia de nosotros y del mundo entero.
Amén.
Puede interesarte -> Conoce la verdadera historia de la imagen de la Divina Misericordia
Cuenta Instagram de la Luz de Maria -> Aquí
En el Evangelio del día del 28 de octubre, Jesús nos muestra que toda vocación… Read More
En el Evangelio del día del 27 de octubre, Jesús nos revela que la verdadera… Read More
En el Evangelio del día del 26 de octubre, Jesús nos habla de la única… Read More
Hay una palabra que atraviesa el Evangelio del día del 25 de octubre como un… Read More
En el calendario de los grandes eventos del Año Santo, el 11 y 12 de… Read More
Hay un profundo pensamiento de San Carlo Acutis que encierra en pocas palabras un gran… Read More