En aquel tiempo, Jesús se llevó a Pedro, a Santiago y a Juan, subió con ellos solos a una montaña alta, y se transfiguró delante de ellos. Sus vestidos se volvieron de un blanco deslumbrador, corno no puede dejarlos ningún batanero del mundo. Se les aparecieron Elías y Moisés, conversando con Jesús. Entonces Pedro tomó la palabra y le dijo a Jesús: «Maestro, ¡qué bien se está aquí! Vamos a hacer tres tiendas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías.» Estaban asustados, y no sabía lo que decía. Se formó una nube que los cubrió, y salió una voz de la nube: «Éste es mi Hijo amado; escuchadlo.» De pronto, al mirar alrededor, no vieron a nadie más que a Jesús, solo con ellos. Cuando bajaban de la montaña, Jesús les mandó: «No contéis a nadie lo que habéis visto, hasta que el Hijo del hombre resucite de entre los muertos.» Esto se les quedó grabado, y discutían qué querría decir aquello de «resucitar de entre los muertos».
Palabra del Señor
Puede interesarte -> ORACION A SAN JUDAS TADEO PARA CASOS DIFICILES Y DESESPERADOS
Cuenta Instagram de la Luz de Maria -> Aquí
León XIV y el Borgo Laudato si’ se encuentran en Castel Gandolfo: el viernes 5… Read More
El amor a Dios no es estático ni distante, sino un movimiento que involucra a… Read More
El Papa León XIV nos recuerda una tarea urgente: curar a las personas heridas sin… Read More
La canonización de Pier Giorgio Frassati, celebrada en la plaza de San Pedro por el… Read More
En el Evangelio del día del 13 de septiembre, Jesús habla con imágenes sencillas pero… Read More
Carlo Acutis nos deja una pregunta que interpela profundamente, una reflexión que va más allá… Read More