Madre Teresa: así encontraremos energía y unión con Dios

Hay una fuerza oculta que puede cambiar nuestra forma de pensar, de hablar y de vivir cada día, y esa fuerza está ligada a la reflexión y a la oración.
Madre Teresa de Calcuta nos revela este sorprendente y fundamental secreto

Según el pensamiento de Madre Teresa de Calcuta, una de las figuras más influyentes y queridas de la modernidad católica, existe una forma muy concreta de encontrar energía y unión pura con Dios.
Todo lo que la Santa dice sobre este tema fundamental está relacionado con la oración, la reflexión, pero sobre todo con el silencio.
Por eso, se vuelve esencial seguir sus consejos para abrir nuestro camino hacia la unión con el Padre, con el Hijo y, al mismo tiempo, con el Espíritu Santo.

Reflexionemos sobre esta pregunta:
¿Alguna vez hemos intentado realmente encontrar un momento de silencio dentro de nosotros?
Esto es exactamente lo que la Santa nos invita a hacer.

Madre Teresa nos enseña, con su mensaje esencial, que este silencio interior no solo es difícil de alcanzar, sino que también es fuente de una fuerza extraordinaria, capaz de transformar radicalmente nuestra existencia.
Según ella, en el silencio más profundo, cuando hacemos el gran esfuerzo de orar sin distracciones, encontramos una energía nueva y muy importante.

Madre Teresa: la energía en la oración y el silencio

Pero debemos tener cuidado: no se trata de cualquier energía.
Se trata de una fuerza que nace de la unión con Dios, una fuerza capaz de transformar cada una de nuestras acciones, palabras y pensamientos.
La clave para una vida transformada es, entonces, esta: la unión con Dios.

Madre Teresa de Calcuta habla de una unión real y profunda.
No se trata solo de un concepto espiritual y abstracto.
La Santa va al grano: es una invitación práctica a vivir con un corazón más liviano, menos distraído, más enfocado en lo que verdaderamente importa.

Una luz que viene de Cristo

El papel de Cristo en esta unión es central.
Un mensaje sorprendente está precisamente en la conciencia de que sin esa luz que irradia Cristo, nuestras palabras solo aumentan la oscuridad.
Jesús es luz.
Cristo ilumina cada uno de nuestros pensamientos y acciones.
Solo siendo conscientes de esto podremos alcanzar aquello a lo que la Santa nos invita.

Las palabras de Madre Teresa nos ayudan a entender mejor su mensaje:

“El silencio interior es muy difícil, pero debemos hacer el esfuerzo de orar. En el silencio encontraremos nueva energía y una verdadera unión con Dios. Su fuerza se convertirá en la nuestra para hacer bien cada cosa, y así sucederá con la unión de nuestros pensamientos con los suyos, de nuestras oraciones con sus oraciones, de nuestras acciones con sus acciones, de nuestra vida con su vida. Todas nuestras palabras serán inútiles si no provienen del fondo de nuestro ser. Las palabras que no dan la luz de Cristo solo aumentan la oscuridad en nosotros”.
(Fuente: pensamientos de Madre Teresa de Calcuta)

Una realidad luminosa

El silencio interior requiere un esfuerzo, porque en nuestra vida cotidiana estamos acostumbrados al frenesí y al ruido.
Pero es justamente ese esfuerzo el que puede abrirnos a una realidad diferente, más grande y más luminosa.
Lo que la Santa nos deja como herencia es una enseñanza central y esencial:
cuando encontramos el silencio dentro de nosotros, podemos acceder a una gran energía espiritual.

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