El 22 de agosto se festeja la fiesta de Santa Virgen María como Reina Madre de Jesús, El Rey del Universo.
Pedimos una gracia a María Reina con esta poderosa oración
Súplica a María Reina
Alégrate, Reina del cielo;
aleluya.Porque el que mereciste llevar en tu seno;
aleluya.Ha resucitado, según predijo;
aleluya.
Oh, María Virgen y Reina del Cielo,
amorosa Madre de todos, en la Tierra.
Tú, eres el gozo
de todos los que a ti recurrimos,
con devoción y humildad,
a implorarte solución a nuestras penas.
Los enfermos, sanan,
reciben nuevas energías
que confortan su cuerpo y su alma.
Los afligidos, recobran
la alegría del corazón.
Los pobres y necesitados,
ven resueltos sus problemas y angustias.
Los que sufren de soledad,
encuentran tu amorosa compañía.
Nadie que recurra a ti,
sale defraudado,
y hoy ante ti me presento,
con muchas necesidades y sufrimientos,
para implorar tu ayuda y consuelo.
Tu que todo lo puedes,
Madre de gran corazón,
bondad infinita,
apiádate de mí y confórtame
de mis penas y amarguras.
(Solicitar el favor)
No dejes que caiga en la desesperación,
amada Madre,
en ese pozo profundo del que es difícil salir.
Acógeme bajo tu protección
y muéstrame la luz en este túnel oscuro,
en que no encuentro claridad,
permite la resurrección de mi corazón,
dando una solución a mis necesidades.
Ruega por nosotros a Dios;
aleluya.Gózate y alégrate, Virgen María;
aleluya.Porque ha resucitado Dios verdaderamente;
aleluya.
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