Tú permitirás, Dios Todopoderoso, que me dirija a Ti,
y que te hable con total libertad; yo, que sólo soy tierra y polvo,
y sin embargo estoy encadenado por Tu amor.
Antes de conocerte, no existía, era infeliz,
el sentido de la vida era desconocido para mí y en mi ignorancia
mi ser profundo me escapaba.
Gracias a Tu misericordia, comencé a existir:
ahora sé, sin ambigüedad, que tuve la existencia por Tu bondad.
Sé que Tú, que no necesitabas que yo existiese,
no me diste la vida para ser desgraciado.
Concédeme que te adore, nuestro Padre y a tu Hijo contigo;
para ser digno del Espíritu Santo que procede de Ti
por el único Hijo.
Amén
Puede interesarte -> Oración para comenzar el día y descansar en las manos de Dios
Cuenta Instagram de la Luz de Maria -> Aquí
En el Evangelio del día del 28 de octubre, Jesús nos muestra que toda vocación… Read More
En el Evangelio del día del 27 de octubre, Jesús nos revela que la verdadera… Read More
En el Evangelio del día del 26 de octubre, Jesús nos habla de la única… Read More
Hay una palabra que atraviesa el Evangelio del día del 25 de octubre como un… Read More
En el calendario de los grandes eventos del Año Santo, el 11 y 12 de… Read More
Hay un profundo pensamiento de San Carlo Acutis que encierra en pocas palabras un gran… Read More