En este segundo día de novena miramos una vez más a la vida de San Carlo Acutis, joven enamorado de la Eucaristía.

Para él la Misa era la cita cotidiana más importante, el encuentro que transformaba sus jornadas. Su fidelidad a Jesús presente en el Sacramento nos recuerda que la santidad nace de la amistad con Cristo. Carlo nunca separó la fe de la vida: la unión con Jesús era el centro de sus decisiones, de sus estudios, de sus relaciones. Su sencillez nos dice que no hacen falta gestos extraordinarios, sino un corazón que busque cada día permanecer junto al Señor.
Novena a San Carlo Acutis, segundo día: vivir unidos a Cristo
San Carlo Acutis nos enseña que la fuerza para afrontar las pruebas nace de la unión con Jesús. Su “programa de vida” no era otro que éste: no dejarse nunca separar del amor de Dios.
Oración inicial
Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, yo os agradezco por todos los favores y gracias con que habéis enriquecido el alma de San Carlo Acutis durante sus quince años transcurridos en esta tierra y, por los méritos de este amado Ángel de la Juventud, concededme la gracia que ardientemente os pido…
(se pide la gracia que se quiere obtener).
“Estar siempre unido a Jesús, he aquí mi programa de vida”
Para Carlo no era un eslogan, sino una elección concreta: cada instante de su vida era vivido en la presencia de Jesús. Esta unión le ayudaba a mantener la alegría, a cultivar amistades sinceras, a no dejarse arrastrar por las modas y las superficialidades del mundo. Siguiendo su ejemplo, también nosotros podemos decidir vivir con Jesús a nuestro lado: en el estudio, en el trabajo, en la familia, en cada pequeño gesto de la vida cotidiana.
Oración
San Carlo Acutis, tú que viviste cada día con Jesús en el centro, ayúdame a permanecer fiel a Él y a no apartarme nunca de su amor. Así sea.
Recemos juntos
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5 “Padre Nuestro”
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5 “Ave María”
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5 “Gloria al Padre”
Oración de cierre
Concluimos este segundo día confiándonos al Padre que hizo de Carlo un signo luminoso para los jóvenes y para toda la Iglesia. También nosotros queremos seguir su camino de sencillez y amor, viviendo siempre unidos a Cristo.
Oración
Dios Padre de Misericordia, que has elevado a la gloria de los altares a San Carlo Acutis, para que por él Tú seas más glorificado, y nos has dado el honor de invocarlo Santo, porque vivió Tu voluntad en todas las cosas, por sus méritos, concédeme la gracia que ardientemente deseo. Amén.
Fuente: Preghiere per la famiglia
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